Obra póstuma del Profesor Geólogo Vicente Sánchez Cela
"Geología Global; Expansión Granítica vs Tectónica de Placas”
Prólogo de Danilo Antón
Por esas ironías del
destino, el nuevo libro del Profesor Vicente Sánchez Cela: “Geología Global;
Expansión Granítica vs. Tectónica de Placas”, se transformó en su obra
póstuma.
Del mismo modo, este
prólogo, se transforma en un sentido homenaje a un hombre íntegro, investigador
incansable de los misterios de las ciencias geológicas y explorador sagaz de
los orígenes de este planeta que se resiste a ser estudiado a través de dogmas
preestablecidos.
Y sí, Don Vicente,
practicaba la ciencia con sabiduría. humildad y generosidad como lo atestiguan
sus alumnos.
Desde las cátedras de
Madrid y Zaragoza, este geólogo gallego está sacudiendo las raíces del
pensamiento geológico oficial tanto en España como en el resto del mundo.
Se atrevíó a discutir el
dogma, casi unánimemente aceptado, de la tectónica de placas, y todavía más,
introdujo nuevos conceptos sobre las fuentes de energía científicamente
posibles, para explicar la formación y dinámica de la corteza terrestre en
forma holística e integral.
Esta obra que se publica
en un momento particularmente triste, surge a la luz pública como resultado de
numerosos estudios y valiosísimas publicaciones que este autor realizó a lo
largo de una prolífica carrera de más de 50 años. El trabajo permite obtener
una visión integral sobre las ideas e hipótesis originales e innovativas
desarrolladas por Sánchez Cela durante su productiva vida académica.
En primer lugar, debemos
reconocer que su modelo es revolucionario. Sánchez Cela se enfrentó a varios
aspectos contradictorios de la teoría –dogma- en boga sobre el origen y
evolución de la corteza terrestre y los continentes, la “Teoría de las Placas
Tectónicas” y, frente a una oposición casi unánime, tuvo el valor de
exponer otras alternativas, explicando en forma satisfactoria la mayor parte de
los fenómenos geológicos y petrogenéticos observados, que habían sido ignorados
por los defensores de la teoría oficial.
En primer lugar, Sánchez
analizó la abundancia de los granitos, tanto en continentes como en áreas
insulares y oceánicas. Por otro lado, concibió la idea de que el planeta Tierra
almacenó una enorme energía interior como consecuencia de los impactos
innumerables de planetesimales durante su formación. Esta energía se conservó,
sobre todo, en las fases densas de los silicatos que permanecieron estables en
la profundidad del manto durante largos períodos de tiempo.
De acuerdo a Sánchez, el
cuarzo y los feldespatos, componentes básicos de los granitos, tendrían sus
equivalentes de mayor densidad en el manto: la coesita, la stishovita, las holanditas
y otros minerales análogos. En las zonas del manto contiguas a la corteza y en
la propia corteza estos minerales pierden su estabilidad y experimentan cambios
de fase, con aumento de volumen dando lugar a la aparición de los típicos
minerales graníticos corticales (p.ej. cuarzos y feldespatos).
Estos procesos se dan con
generación de calor, causando fusiones magmáticas locales y compresiones
laterales y verticales, que culminan en orogénesis y vulcanismo en los
continentes y dorsales oceánicas. Asume Sánchez que cuando la fusión se da en
la base de cuencas oceánicas profundas, constituidas por rocas calcáreas
(calizas y margas), las rocas graníticas iniciales se enriquecen en calcio,
magnesio y otros elementos, dando lugar a la mayor parte de los basaltos.
Es muy difícil explicar
en detalle, en este prólogo, el complejo modelo expuesto con claridad por
Sánchez en este libro, debido a la cantidad de datos petrográficos,
petrológicos, tectónicos y geofísicos que sirven de base a su importante
teoría. Baste decir que el lector se lleva la impresión que ningún
aspecto fue descuidado. Las experiencias y conocimientos geológicos de
Sánchez Cela eran muy extensos y profundos. Dominaba todas las ciencias de la
tierra y sobre esa base construyó un nuevo enfoque para la interpretación de
los principales fenómenos geológicos de la corteza.
En lo personal, estoy muy
honrado de poder escribir este prólogo, a la vez que obituario, de un libro que
estoy seguro, cambiará radicalmente nuestra interpretación de la geología
global del Planeta Tierra.
Y finalmente, al querido
profesor Don Vicente, dondequiera que se encuentre, le decimos que sus ideas
perdurarán. Ellas han sido sembradas en muchas mentes jóvenes que florecerán
más temprano que tarde generando nuevas formas de percibir e interpretar los
orígenes y futuros de este planeta hospitalario que consideramos nuestro
hogar."
Danilo Antón
No hay comentarios:
Publicar un comentario