Un poco de geografía: el Suultanato de Omàn

En la región oriental de la península arábiga, sobre el Estrecho de Ormuz, y enfrentado a la Repùblica Islàmica de Iràn se encuentra el Sultanato de Omàn.  Cuenta con una superficie de 309 500 km² y unos 3 millones de habitantes.

Tiene una costa de cerca de 1560 km de longitud​ y cuatro zonas naturales: la llanura costera; un desierto interior llano, la región del Dhofar, al sur, enfrentada al oceàno Ìndico y las cadenas montañosas sobre la costa norte, cuyo pico más alto es el Jabel Sham, con 3000 metros de altitud. Las montañas dejan una llanura costera en la costa norte donde están localizadas las principales ciudades del país, Mascate (la capital), Matrah en el norte y Matrah en el Sur. Tiene un exclave en la península de Musandam que tiene una posición estratégica en el estrecho de Ormuz y que está separada del resto del país por territorio de los Emiratos Arabes Unidos.

Històricamente, Omàn fue el centro de un imperio importante sobre las costas del Ocèano Îndico. A fines del siglo XVIII su influencia se extendiò hasta Iràn y al actual Pakistàn al norte y Zanzìbar al sur, en la costa africana.   

Su poder declinò durante el siglo XX y el sultanato quedó sometido a una fuerte influencia de Gran Bretaña, En la actualidad forma parte del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo manteniendo una posición relativamente independiente con relación a las polìticas de Arabia Saudita y sus vecinos los Emiratos Arabes Unidos. Esto independencia se ha visto con relación al bloqueo a Qatar y la guerra del  Yemen, donde ha mantenido una cierta neutralidad.

La religión predominante es el Islam ibadi, en la rama que se denomina el jarismo que se separò del sunismo y del chiismo el año 657.  A diferencia de los sunníes, que consideraban que el califa debía ser un árabe varón miembro de la tribu de Quraish y de los chiitas, que consideraban que debía ser Ali, yerno de Mahoma, o un descendiente directo suyo, los jariyíes pensaban que la dignidad califal emana de la comunidad, que debe elegir libremente al más digno "aunque sea un esclavo negro".

Esa diferencia se expresa en la independencia que muestra el Sultanato con relación a sus socios sunìes (Ärabia, los Emiratos) del golfo y los chiitas iraníes.

Como los demás reinos y emiratos del Golfo es una monarquía absolutista en donde el Sultàn tiene autoridad total sin una constitución que limite sus poderes.

En el siglo XX hubo un movimiento separatista en el Dhofar apoyado por la Uniòn Soviètica que finalmente fue derrotado.