D.Antón
En
América, se desarrollaron múltiples formas de comunicación a
grandes distancias, muchas de las cuales pasaron desapercibidas o
fueron subestimadas por los europeos. Una de las principales formas
de comunicación a larga distancia fue el humo. Los pueblos de todo
el continente desarrollaron un lenguaje a partir del humo desprendido
de sus fogones que les permitía comunicarse a través de grandes
distancias. La existencia de este medio de comunicación no pasó
desapercibido para muchos cronistas que si bien nunca entendieron el
significado de este lenguaje translinguístico supieron que era una
herramienta muy valiosa en manos de las naciones de América del
Norte.
La
existencia de dicho sistema fue también identificado en América del
Sur. Un ejemplo de ello se dio cuando llegaron naves al Río de la
Plata, en la expedición española de Gaboto que estaban en el
Paraguay a más de mil quilómetros se enteraron en unos pocos días
(Aníbal Barrios Pintos, Los Aborígenes del Uruguay). Otro
ejemplo fueron los mensajes con humaredas que en grandes cantidades
se percibían en el sur de América, particularmente en la Tierra del
Fuego de donde deriva su nombre.
Con
el tiempo, dicho sistema fue caricaturizado en los filmes sobre
“indios” y en los dibujos animados. Sin embargo, más allá de
las caricaturas y frivolizaciones, la comunicación por humo fue uno
de los sistemas de comunicaciòn intercultural más eficaces de
comunicación intercultural que existieron en las sociedades humanas.
De "Amerrique, los huérfanos del paraiso", Danilo Antón, Piriguazú Ediciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario