¿El gas natural y el petróleo son
inagotables?
Una teoría geológica revolucionaria que se ajusta a
los datos de la realidad
D.Antón
La teoría acerca del origen del
petróleo y el gas natural de Thomas Gold es revolucionaria. En profundidad, tal vez a unos 200-400 kilómetros por debajo de la
superficie de La Tierra se dan las condiciones para la formación de
metano (CH4). Por su menor densidad el metano tiende a
ascender cuando las fracturas del manto rocoso que lo cubre lo
permite. Es un proceso lento, que puede llevar millones de años
(incluso cientos de millones) hasta que se acerca a la superficie. En
su ascenso el metano se oxida. Utilizando el oxígeno de los óxidos
de Fe (hematita), sulfatos (anhidrita) y de otros oxidos y sales
oxigenadas, el H (hidrógeno) se convierte en H2O (agua)
y el carbono en CO2 (dióxido de carbono). El hidrógeno
se oxida mas fácilmente por lo que el carbono se va concentrando, el
CH4 se convierte en C2H6 (etano)
este a su vez en C3H8 (propano), este en C4H10
(butano) y así sucesivamente, hasta llegar a los
hidrocarburos líquidos (p.ej. Naftas), viscosos (alquitranes y
bitúmenes) y sólidos (lignitos, hullas y antracitas).
Este proceso se da naturalmente pero a
profundidades menores (menos de 10 km) es ayudado por la acción
metabólica de las hipertermobacterias (que viven en los poros de las
rocas a grandes presiones y temperaturas de 100 grados o más).
La reducción de sulfatos metálicos genera sulfuros metálicos que son transportados por los fluidos
carbonosos hasta que se precipitan formando yacimientos metalíferos
(p.ej. sulfuros de plomo-galena, de hierro-pirita, de
cobre-calcopirita, de zinc-blenda, etc).
En su ascenso los hidrocarburos pueden
ser retenidos por mantos rocosos o capas impermeables dando lugar a
su acumulación formando yacimientos de petróleo y/o gas.
Por esa razón, contrarrestando las
teorías ortodoxas, Thomas Gold sostiene que los yacimientos de
hidrocarburos son de origen mineral abiótico con colaboración
bacteriana (pero no son de origen fósil) y muchos yacimientos
metalíferos son de origen biótico.
De acuerdo a Gold los volúmenes
existentes de petróleo y gas son muchísimo más abundantes de lo
que se sostiene habitualmente (la caida de los precios muestra en los
hechos la sobreoferta que se relaciona con la abundancia).
A los geólogos y científicos
ortodoxos se les plantea un problema: van a tener que rediseñar sus
estrategias de búsqueda y explotación de hidrocarburos, y por
supuesto, reescribir sus libros. Lógicamente se oponen, como suele
suceder en cualquier cambio abrupto de paradigma. Pero como de
costumbre, la realidad se impone y, tarde o temprano, la teoría del
petróleo fósil (para mí absurda) pero que es sostenida por la
inmensa mayoría de geólogos, ingenieros, académicos, burócratas y
políticos, como tantas otras falsedades, terminará por derrumbarse.
(para complementar información en este
tema conviene leer el libro de Thomas Gold, “The Deep Hot
Biosphere” o un resumen que publiqué titulado “¿Inagotables?
Patróleo y Gas”, D.Antón, 2006, Piriguazú Ediciones.)
1 comentario:
Excelente!
Publicar un comentario