Las bolsas de valores en China disparan su valor y "preocupan a los expertos” 



El mercado de valores de China atrae cada vez a un mayor número de inversores. Como consecuencia, los beneficios de las empresas chinas han alcanzado en la última semana niveles no vistos en cinco años. Esta carrera casi sin precedentes sigue a la que ayudó a elevar las bolsas mundiales al nuevo máximo en el último mes. El aumento que se produjo el 6 de julio del 2020 en la bolsa añadió más de 460.000 millones de dólares al valor de las acciones chinas, solo por detrás de la jornada de julio del 2015 en la que se produjo la mayor acumulación de riqueza por parte de los accionistas desde el inicio de la crisis financiera global. Este avance continuó el 7 de julio pero a un ritmo más lento. El índice CSI 300 —que engloba a las acciones de las 300 mayores empresas chinas— subió un 0,6%, registrando un volumen de operaciones diario que superó en más de tres veces a la media de tres meses. Desde finales de junio, su cotización incrementó más de un 14%. La venta de acciones emitidas por fabricantes de bienes de primera necesidad aumentó un 3,1%. Esta dinámica positiva influyó en la retórica de los medios de comunicación chinos. Algunos periódicos instaron a que los inversores fuesen más prudentes: The Securities Times — una de las publicaciones financieras de mayor tirada en China — advirtió de que deberían ser conscientes de los posibles riesgos y les animó a no utilizar el mercado de valores chino como una forma de hacer fortuna de la noche a la mañana. "Es probable que el mercado se consolide después de los fuertes repuntes, especialmente porque las grandes empresas han superado a las pequeñas por un gran margen [de ingresos] en la última semana. Los reguladores tampoco quisieran ver ganancias rápidas en el mercado. Pero sigue habiendo un gran número de oportunidades, y los inversores continuarán recurriendo a algunas empresas rezagadas para que la tendencia alcista siga intacta", señaló Shen Zhengyang, analista de la empresa Northeast Securities, citado por la agencia Bloomberg. A su vez, el copresidente de la compañía First Seafront Fund Management, Wang Hongyuan, advirtió que los inversores deben ser cautelosos. Si bien los activos de China tienen "los fundamentos más fuertes del mundo", las burbujas en algunas partes de ese mercado alcanzan tamaños que "no se han visto en cinco años", y los riesgos de invertir en ellas "son enormes". A pesar de las estrictas regulaciones de capital que limitan las opciones de inversión y los bajos tipos de interés, los inversores minoristas siguen recurriendo a las acciones de las empresas chinas. Este rally fue impulsado por la recuperación económica del país y la gestión del brote por parte del Gobierno chino, según los analistas. Los comerciantes chinos se aprovechan de la situación para seguir con su impulso inversionista. Aumentaron el 6 de julio el volumen del apalancamiento —la relación de la deuda a los recursos propios— en el mercado de valores nacional más allá de los 1,2 billones de yuanes (171.000 millones de dólares). Semejante nivel no se registraba desde finales de 2015.
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